El objetivo del poker es ganar. Más específicamente, el objetivo del poker es ganar dinero. Ganar te otorga más dinero, que aunque juegues por amor al juego, es lo que te permite seguir jugando. Si estas perdiendo, empezaras a quedarte sin fichas rápidamente y tu juego terminara.
Mientras que el objetivo del poker es ganar mas fichas, uno debe ser cuidadoso y asegurarse de no ser demasiado codicioso. La codicia puede destruir aun a los mejores jugadores de poker, llevándolos a cometer errores enormes y tirar a la basura pilas de fichas, al perseguir pozos que no tienen chances de ganar.
La codicia hiere tu juego de varias maneras. Un jugador codicioso juega suelto, y termina perdiendo mas fichas de las que gana. La razón es simple, dejan que su deseo de tener mas fichas se meta en el camino del juego inteligente. La codicia es una emoción, y no hay lugar para emociones en la mesa de poker.
Los jugadores codiciosos juegan a menudo por sobre su bankroll. Los jugadores de poker inteligentes saben cuanto pueden darse el lujo de gastar jugando poker y saben cuando retirarse. Los jugadores codiciosos siempre tratan de ganar ese último gran pozo y siguen invirtiendo dinero para reemplazar lo que pierden. Se olvidan de cuando retirarse y continúan tirando buen dinero por una mala causa.
La codicia es un estado visible y tangible de la persona. Otros jugadores notaran cuando uno se vuelve codicioso, y reaccionaran acorde a la situación. En el mejor de los casos, un jugador codicioso termina enfrentando una mesa de oponentes irrespetuosos y para nada amistosos. Y en el peor de los casos, estos jugadores quedan abiertos a los tiburones que pueden sentir su debilidad y tomar ventaja de ella.
Debes jugar para ganar, pero date cuenta que no puedes ganar todas las manos. Si empiezas a pensar lo contrario, te estas volviendo codicioso y debes tener cuidado.
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